jueves, 19 de mayo de 2011

25. COLEGIALA

                     En los corredores deambulan almidonadas las jóvenes de uniforme azul marino, de blusa de cuello blanco y tirántes gruesos sobre el pecho, el corte a media pierna, calcetas altas y zapatillas negras, arremolinadas se colocan en el patio para la formación, es la hora de la salida.

          Como procesión de Semana Santa y con el ritmo que produce el roce de las faldas caminan presurosas por el capitel del portón de la entrada que desemboca a la segunda avenida, los ojos de la protectora fija la mirada en ver la seriedad de la salida de la  última muchacha.

          En las afueras todo es alegría, algunas se agrupan en la esquina chismorreando los comentarios de la última clase, las más avispadas se hacen muecas y señas con los muchachos que las esperan ansiosos, mas allá.

          La más bonita y por cierto la mas seria camina presurosa hacia la avenida, lleva abrazado un cartapacio negro donde sobresale una muñeca desaliñada con un sudadero rojo que resalta la palabra SKA. Se le ha hecho tarde,  corre hacia la esquina, el crucero de la tercera donde aborda un bus amarillo.

          Bueno es decir que era su primer día de trabajo, allí frente al parque Colón, en el edificio medio antiguo que lleva por nombre Colegio Montessori, funciona la academia de ingles de Mr. Derby, personaje simpático, de los que estudiaron High School allá en los Estados Unidos y ahora se dedican a enseñar la lengua del tío SAM. 

La Chica se hace presente en la receptoría donde el Profesor, con su tacuche negro y su morena calva le espera:

---- Buenas tardes….---

---- Buenas tardes…… tu nombre?----

--- Sofía…… Sofía Guillén….---

---Oh si, la hermanita de Gloria, es así ?--- Si… Miriam me habló, que te recomienda…--- indicándole --- Siéntate un momento, te voy a presentar con el personal, y luego te explico lo que tienes que hacer…..---

          Los alumnos había hecho ya su ingreso a las instalaciones y se encontraban en el patio a la espera de la señal del timbre para principiar las clases, en la secretaría Sofía permanecía sentada frente al escritorio principal. Mr. Derby, seguido de tres de los maestros se acerca.

----Les voy a presentar la nueva secretaria. Sofía se llama…..----- dirigiéndose a ella --- Sofía….!   Ella es Miriam…., Alfred…. Y Haroldo.---

---- Mucho gusto…..----

          Algo pasó en ese instante un cruce de miradas, pero esa carita morena pasó a formar parte de las ilusiones del profesor, así almidonada y todo, con los cabellos oscuros que resorteaban sobre sus hombros, dio el destello de sus ojos grandes y bellos al corazón de uno de los maestros.

          Ocurrieron las clases, cada quien se apropiaba de su salón en procura de sus alumnos y alumnas en el aprendizaje del idioma inglés, el timbre sonaba y el grupo se despedía y en el pequeño receso los maestros se reunían en la oficina para tomar una tasa de café o charlar un momento.

          Los días se hacían viejos, un poco la comodidad, confianza las charlas entre maestros y secretaria se hacía mas fluidos, cada vez mas frecuentemente  Haroldo se apoderaba de la atención de la muchacha, con quien  trataba de pasar la mayor parte de su tiempo libre entre clases.

          En cierta ocasión, durante un receso Sofía se encontraba atareada haciendo unos carteles de sus prácticas de magisterio,

---- Le ayudo --- siempre con la cortesía Verdad? Insinuó Haroldo---

--- No muchas gracias --- si ni siquiera voltear a ver.

          El joven tomo un pequeño pedazo de papel y no cabe duda del nerviosismo, lo convirtió en una pelotita, que la pasaba por su mano sin saber que hacer con la misma, mientras trataba de llamar la atención de la secretaria, ella absorta en su trabajo y con la mirada fija en su actividad, no se inmutaba de la presencia del profesor que insistía en hacer de ese momento una conversación agradable.

--- Sabe, hablamos en otra oportunidad si, al momento estoy muy ocupada---

          En ese instante cuando se incorporó para ver al sujeto, el botón superior de la blusa se desprendió, dejando ver la belleza de sus bien proporcionados senos, instintivamente él, tomó entre sus dedos medio y pulgar el trozo de papel hecho bolita y lo lanzó, con tan atinada suerte que fue a caer entre los pechos de la muchacha, quien con un arrebato de cólera le dirigió la mirada, mientras fruncía el seño.

--- Abusivo……..! ---

          Palabras que ya no escuchó, pues salió tan de carrera que se percató del enojo. Una hora mas tarde, furtivamente se acercó a ella y viendo que se encontraba solo le dijo:

--- Mil disculpas, Srita. Sofía……----


          Eran las tres de la tarde y el teléfono suena.

--- Haroldo?....

--- Si dígame…

---Supongo que va a venir a la fiesta del SKA. Verdad?---

--- Si claro que si…

--- Mire de casualidad, usted no tiene unos amigos para que vengan también.---

          En el tapanco de una escuela, un tocadiscos sonaba con las tonadas de los Teen Tops, Billy Vaughn, Elvis Presley etc.  Las chicas del SKA, celebraban en ese lugar su inicio a clases, la mayoría viéndose las caras y otras bailando, con ausencia de muchachos.

--- Chicas les presento a Haroldo y a su amigo.----

--- Hola, mucho gusto!----

          A fin alguien se animó a lanzarse al ruedo, la velada se hizo por demás agradable y repaso fue el primer bombazo del año.

Y valla sino fue el bombazo del año,  después de ir a dejar a Alvarez a su casa, en el viejo auto, el  charnel verde arbeja se dirigió a la residencia zona 9, en donde a una cuadra de distancia de la casa de la chica, se estacionó cerca de la esquina y después de una pequeña charla de comentarios sobre el repaso, se acercó el momento sublime de ese día.

--- Sabe una cosa….--- la saliva se le atravesaba por la garganta y las gotas de sudor bajaban por la frente.---

--- Si dígame…… o es que quiere que le devuelva sus libros.---

--- No, no es eso----

Y luego se inundó el recinto de un silencio sepulcral. Ella sentada con sus manos sobre el regazo y acuñada hasta la puerta, tampoco insinuaba a mover sus labios.

--- Es que…..?--- insistió el joven.--- Quería preguntarle si quiere ser mi  novia…..

          El silencio se hizo mas prolongado, ambos miraba hacia el frente y nadie tomaba la iniciativa, después de algunos minutos que parecieron horas.

--- SI……---- se escucho tan pálidamente que no fuera cierto.

          Tomando las fuerzas de flaqueza, él se acerca y dice tímidamente:

--- Le puedo dar un beso?------

          Eran las Cuatro de la tarde, en una ventana a medio abrir alguien husmea, el nerviosismo se hace presa de la chica quien se encamina de la habitación para la sala. El timbre suena:

--- Ya viene…..!

--- Juana y como es él?---

--- Pues mire es algo gordito, tiene una chumpa negra con franjas corintas….---

--- No te quedés allí, andá, abrile  el portón….. Y le avisas a la Chiqui…..

--- Buenas tardes con la Srita. Sofía…..

          Después de haber penetrado por el jardín del frente, pasó a la sala, el silencio que no se dejaba escuchar y las manos que se frotaba con nerviosismo, los minutos pasaban y la espera se hacía eterna. Se abre una puerta y se dibuja la belleza de la muchacha con una blusa amarilla y falda café, con su peinado abombado, su grácil figura se acerca.

--- Hola … como estas? --- mientras estampa un besa en la mejilla ---

--- Hola.---- las palabras no salían de la garganta de Haroldo, que sudaba---- ¿ Y tu papá…..?----

---- No tardará en venir…--- mientras se sentaba junto a él y le tomaba la mano.

          Al fondo se escucha una voz femenina, que un sonsonete canta:

----“ Los monos del Maritaté…. El mono mas grande se parece a Usted…”!----

Mientras se acerca a la sala.

---Ella es Mamá Lole.----dirigiéndose al joven---- es mi abuelita.

--- Mama Lole…. El es Haroldo.----

--- Mucho gusto…..!

--- Soledad Solís, para servirle a Dios y a usted… muévase un poquito que me voy a sentar aquí en medio

          Al fondo para la mucama de la casa, que va de una habitación a otra, como mensajera para llevar la información a todos los rincones.

--- Doña Sole…….!--- alguien grita ---- venga un momento.

--- Hay mi Dios para que seré yo buena pues.---- se levanta apoyándose en sus botines de color negro  y con la dificultad que le da su edad.

          El escenario se pone a punto, un auto ha hecho su ingreso al garaje de la casa, el silencio se rompe con la apertura de la puerta, hace su ingreso un hombre alto vestido de militar, con birrete y con pistola.

--- Buenas tardes--- indica --- Hola mija como estas—y la abraza….

--- Hola Papa…..Mire….!, le presento a Ha-roldo…----

--- Ha si jovencito… mucho gusto, y a que debo su agradable visita…..!!!!!---

          Sofía se esfumó, mientras el joven tragaba saliva y hacía los máximos esfuerzos para hablar con el Coronel.

--- Pues bien joven… el otro día reprendí a mi hija porque cargaba un anillo de graduación, me supongo que suyo……, ---con la calidad humana de un adulto que sabía lo harto difícil que es a un muchacho, para acercarse a la casa de la novia.—entonces le pregunté el porque de eso….---

--- Si mi coronel….. si es mío el anillo…. Y … bueno es que yo estaba aquí---- tragaba saliva --- por venía con la intención de hablar con usted…….. resulta que Sofía y yo somos novios y quería pedirle su autorización, para que pueda visitarla..

          En ese instante entra por la puerta un muchacho jovial en mangas de camisa, interrumpiendo la charla:

---- Buenas  Julio Guillén……-----se presenta y se dirige a una butaca y se sienta.

---- Mirá Julio…. ---dice el coronel --- él esta aquí para solicitar mi autorización para salir con la chiqui, que me dice son novios….hacéme el favor andá a llamar a tu hermana y me dejas que termine la charla con el joven…

          Sofía entra en escena y se para a la par del joven.

---- Mija, el joven aquí, como es que se llama…..

---- Haroldo….

---- Bueno me pide que le autorice que te visite y que son novios…..

---- Bueno hacéle una limonada al patojo --- dice Mama Lole --- si viera que buenas

limonadas hace la Chiqui, ya se va dar cuenta que buena es la patoja----

          Adentro doña Sofí la madre, se hace los cometarios con la curiosidad del caso. Ese día no había sido posible conocerlo personalmente pues se encontraba enferma.

          Vaya sino le comía la curiosidad de conocer a su futuro yerno

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